La verdad es que no se ni cómo empezar. Cualquier persona que vea nuestro reportaje pensará que las fotos son bonitas. Muy bonitas. Preciosas. Para mi son muchísimo más que eso…se me han saltado las lágrimas pasando las páginas. Has hecho que este momento tan especial de nuestras vidas quede ahí para siempre. Te aseguro que nunca olvidaré ese día por muchos motivos.
Si me emociono ahora, no me imagino cómo será verlas dentro de unos años. Son una preciosidad. Me sentí feliz el día del reportaje y se que reviviré esa felicidad cada vez que vea las fotos.
Gracias por mirarnos de manera tan respetuosa y conseguir «embotellar» nuestra felicidad. me he visto hermosa, en todos los sentidos, y he visto hermosa a nuestra pequeña familia. Me siento muy afortunada de haberme cruzado contigo.
Inés, gracias, GRACIAS, por este regalo para toda nuestra vida. Espero (y confío) que éste no será el único proyecto que compartamos.